07 septiembre 2016

(de vuelta en el infierno)

"Es siempre al aire libre cuando se consigue no ser uno mismo; uno entra en casa y ya se es uno mismo, vuelves a salir y ya no se es uno mismo. Es en casa donde te asaltan los deseos; al aire libre uno mira y observa. Hay una influencia letal en las paredes."

 

Ugo Cornia, Sobre la felicidad a ultranza
[traducción de Francisco de Julio Carrobles]

4 comentarios:

Beauséant dijo...

Siempre había visto mi casa como un refugio, pero ahora que lo dices...

Tienes una extraña habilidad para posar tus ojos sobre las piezas clave... me gusta....

silbante dijo...

Hoy estaba pensando en hacerme fuerte en casa hasta diciembre, en que ya habrá pasado esto del licuarse, pero después de leer esto no sé si sobreviviría a mis paredes. Probablemente no.
Un abrazo despegadito

M. dijo...

Siempre que quiero ser un perfecto hikikomori acabo cediendo al paseo por el parque y los pensamientos se me van por las ramas de los árboles y la mismidad de me pierde en vagones atestados del metro. Saludos.

vizcayado dijo...

Yo antes vivía en esa fe de que la realidad se divide en dualidades. Pero abandoné esa religión.